domingo, 30 de junio de 2013

¡Ay, los ejercicios de gramática!

Girl Seated, de Winslow Homer

A mi me decantó hacia el lenguaje una profesora de BUP. Era menuda, lista y apasionada, tenía los ojos negros y vivarachos y mientras nos hablaba podía uno ver que estaba ya pensando en la siguiente frase. Era imposible aburrirse en su clase porque a ella le apasionaba el lenguaje. Parecía saberlo todo acerca de él, a todas las preguntas respondía sin dudar, ningún concepto parecía demasiado oscuro. Los análisis gramaticales eran como juegos, acertijos, crucigramas, algo a resolver que te dejaba satisfecho como después de una misión cumplida, algo que era un reto más que una tarea.

Fui muy afortunada con esa profesora porque me transmitió una pasión que todavía siento, por eso y porque, por desgracia, tuve otros profesores a los que no les gustaba ni enseñar ni lo que enseñaban, traigo aquí esta cita de Alex Grijelmo:

"Los ejercicios de gramática y de sintaxis elaborados a regañadientes, explicados por profesores desapasionados, vulnerados luego en la práctica por el profesor de matemáticas y el de química, aprendidos con el deseo de olvidarlos cuanto antes, empujados luego fuera de nuestras cabezas por la irresponsabilidad de locutores, periodistas y, en general, de quienes tienen el poder, no pueden garantizar, en tales condiciones, que en la edad adulta analicemos espontáneamente lo que hay detrás de cada frase ininteligible."


Grijelmo, Alex: Defensa apasionada del español.

jueves, 27 de junio de 2013

Viva el fútbol

Arno at Dusk, de Anthony Brunelli

Vaya por delante que a mí no me gusta el fútbol, y que es habitual que despotrique contra las cifras astronómicas que se pagan a los jugadores, contra los hinchas desaforados y toda la parafernalia en general que rodea al llamado deporte rey. Pero he aquí que voy a tener que desdecirme de todo, reconocer que estaba, no ya equivocada, sino equivocadísima, y que donde dije digo, digo Diego.

¿Que por qué? Pues porque resulta que una de las razones para la expansión de la enseñanza del español en el mundo, es el fútbol. Sí, el fútbol, han leído bien. Y es que vivimos una época dorada en la que Camacho ha estado de seleccionador en China, Michel entrena al Olympiacos, Pepe Reina juega en el Liverpool, Fernando Torres en el Chelsea, Mikel Arteta en el Arsenal, David Silva en el Manchester City y Antonio Luna en el Aston Villa, por citar solo los que más me suenan.

Semejantes embajadores y que la Roja ganara el Mundial han hecho que nuestro país sea reconocido allí donde no llegaron jamás los ecos de Cervantes. Y qué quieren, si el fútbol va a servir para que el mundo aprenda español, viva el fútbol.

Tema aparte es Pep Guardiola, a partir de hoy mi ídolo, lo siento mucho, AT. Yo que estaba convencida de que en el cerebro de los futbolistas solo cabían balones y Ferraris, va Guardiola y se presenta ante la afición del Bayern de Múnich hablando alemán, que previamente ha aprendido porque ha considerado que es importante hablar el idioma de los jugadores que va a entrenar y del país en el que va a vivir. Ahí es nada. Lo dicho, mi ídolo.


martes, 25 de junio de 2013

Muchachas en flor


Jeanne Samary in a Low Necked Dress, de Renoir

En ocasiones es cierto que una imagen vale más que mil palabras, pero es igualmente cierto que hay palabras que son mil veces mejores que una imagen.

Traigo esto a cuenta de una expresión que me parece preciosa y sugerente. Me refiero a ese magnifico titulo de Proust, A la sombra de las muchachas en flor, que evoca cerezos cuajados de flores o naranjos cubiertos de azahar y unas adolescentes sentadas lánguidamente a su sombra. Es la imagen de la belleza con mayúsculas, una belleza que lo es más porque dura apenas quince días en los árboles y quién sabe cuánto en una muchacha, quizás un año, dos a lo sumo será el tiempo que transcurra mientras la belleza estalla y se pasea por el rostro y el ser todo de una joven que se asoma a la vida.

Las muchachas en flor es para mí una expresión que sugiere y embelesa más que mil imágenes. Uno pensará en una muchacha conocida, y otro en aquella Natalie Portman de Beautiful Girls y aún alguno recordará una chica que conoció en su juventud, más hermosa que todo Hollywood y todos nosotros le deberemos a esa expresión el conjuro de belleza y alegría, la vida en estado puro, que despierta en nuestra imaginación. Y que es más belleza porque es fugaz.


domingo, 23 de junio de 2013

El candidato melancólico

Purple Haze, de Peter Maier

José Antonio Millán publicó en 2006 un libro sobre el lenguaje titulado El candidato melancólico. Con semejante título cualquiera podría pensar que el libro trataba de un candidato al que, en plena campaña electoral, asalta una tristeza infinita. Pero no, nada más lejos de la realidad. El autor hace un guiño a la etimología con el título de su libro pues en realidad procede de la frase "el hombre vestido de blanco que tenía la bilis negra":

"¿Blanco?, ¿negro? -podría preguntarse el lector-, ¿dónde se encuentran esos colores? Están encerrados en el interior de las palabras. El latín candidatus viene de cándidus, 'blanco', porque quienes optaban a un cargo en Roma llevaban una toga blanca. Melancolía viene del griego melas, 'negro' y de kholé, 'bilis', y es un rastro de la época en la que se creía que los humores -los 'líquidos'- del organismo influían sobre los humores -'estados de ánimo'- de las personas."

Y así comienza su libro entrando de lleno en esa hermosa ciencia que estudia el origen de las palabras: la etimología, palabra que a su vez procede del griego étymos, 'verdadero' y del también griego logos, 'palabra'.

La etimología nos descubre la historia de una palabra, su procedencia pero también abre la puerta de sus andanzas, ¿en qué otras lenguas tiene la misma raíz una palabra?, ¿quiénes son sus parientes?, ¿a dónde emigró y por qué?, ¿de dónde viene?

Si les gusta el lenguaje lean "El candidato melancólico", no se arrepentirán.

jueves, 20 de junio de 2013

Esos juglares geniales: Les Luthiers


El Concierto, de Caravaggio

El grupo argentino Les Luthiers es difícil de clasificar: son músicos, son humoristas, son lutieres como su propio nombre indica. Muchos de sus números están basados en jugar con el lenguaje. Esta entrada es probablemente la más larga de todo el blog, pero estoy segura de que lejos de aburrirles asomará una sonrisa a su rostro, si no es una risa en toda regla.

Es un fragmento de la obra "Muchas gracias de nada", en el que el rey intenta seducir a María utilizando a un juglar que canta mejor que él. El juglar se ve obligado a trasladar algunas frases del estilo directo al indirecto porque cree que ciertas expresiones no puede decirlas en primera persona y el resultado es un texto lleno de ambigüedades y equívocos, brillante y desternillante a un mismo tiempo.

"A continuación... un fragmento del drama Enrique VI, de William Shakents.
Escena VII del cuadro III del acto I.
El rey enrique VI ha rezado la novena en su cuarto, y después de unos segundos, atraviesa la quinta.
-Ven juglar. Acerquémonos al balcón de María para darle una... serenata. María, María. Mírala ¡Qué beya plebella! ¿Debo abdicar el trono por amor a ella? ¿Vale acaso más una fría corona que un solo reflejo de sol en los dorados cabellos de María Blesing?
-Sí, más o menos.
¡Oh! ¡Oh, dolientes espíritus, oh, sempiternos gemidos, acudid en mi ayuda! decidme qué debo hacer en este momento asiago... ¡Así hago algo! ¡María! ¡María! ¡La corona!, ¡la corona! Pero ¿qué importa una corona..., si el resto de la dentadura está sana? el trono, la gloria vana, el oropel vacuo... ¡Ah! Mira, juglar, mira la estatua que me inmortaliza sobre brioso corcel. Yo, en mi vanidad, ordené que gastaran los dineros del reino en una estatua ecuestre, cuestre lo que cuestre. Mira, mira las figuras; el rey, el caballo..., sólo falta la sota. Paso, paso. el poder, el trono. ¿El trono o María? al fin y al cabo el trono lo quiero para posarme sobre él y satisfacer mis deseos, los más sublimes y los más perversos. En cambio a María la quiero para... ¡caramba, qué coincidencia!

Ven, juglar, ven. Acércate, mira. Quisiera cantarle a María, pero el destino me ha castigado con dura mano en mi inspiración musical. Ruégote ponle música a mis inspirados versos a María:
Rey -Por ser fuente de dulzura...,
Juglar -Por ser fuente de dulzura...,
Rey -Por ser de rosas un ramo...,
Juglar - Por ser de rosas un ramo...,
Rey -Por ser nido de ternura, oh, María yo te amo.
Jugar -Por ser nido de ternura, oh, María yo te amo. Oh, María, él la ama.
Rey -Ámame como yo te amo a ti,
Juglar -Ámelo como él la ama a usted,
Rey - Y los demás envidiarán nuestro amor,
Juglar -Y... todos nosotros envidiaremos el amor de ustedes,
Rey -Oh, mi amor, María mía,
Juglar -Oh, su amor, María suya,
Rey -Mi brillante, mi rubí,
Juglar -Su brillante, surubí,
Rey -Mi canción, mi poesía, nunca te olvides de mí.
Juglar -Su canción, su poesía, nunca se olvide de... sú.
Rey -Tú estás encima de todas las cosas, mi vida,
Juglar -Usted está encima de todas las cosas, suvida,
Rey -Eres mi sana alegría,
Juglar -Usted es susana, eh, María, alegría,
Rey -Mi amor,
Juglar -Su amor,
Rey -Mi tesoro,
Juglar -Su tesoro,
Rey -Mímame,
Juglar -Súmame, ..., súmelo,
Rey -Tanto tú que me metes en lo más hondo de mí...
Juglar -Tanto usted...
Rey -...que ya no sé si soy de mi o si soy de ti...
Juglar -Tanto usted...
Rey -Si tú me amaras a mí, amarías en mí aquello que amamos nosotros y envidiáis vosotros y ellos...
Juglar -Ámelo.
Rey -Cuando miras con desdén...
Juglar -Cuando mira con desdén...
Rey -pareces fría, sujeta,
Juglar -parece fría su..., su cara.
Rey -Por ser tan grandes tus dones, no caben en mi, mi bien
Juglar -Por ser tan grandes sus dones no caben en su sutien,
Rey -No, no...
Juglar -No, no...
Rey -Tunante,
Juglar -Sunante,
Rey -Mi... serable
Juglar -Su... serable,
Rey -¡Guardias a mi!
Juglar -Em, ¡guardias... a él! No, no..."

Les Luthiers, Muchas gracias de nada, Fragmento El rey enamorado.

martes, 18 de junio de 2013

15.000 lenguas diferentes

The Song, de William Merritt Chase

Escribe George Steiner que los hombres (y las mujeres, añado yo) son iguales en toda la Tierra, que todos respiran el mismo elemento químico y fallecen si carecen de él. Todos tienen el mismo número de dientes y de vértebras. Estos seres humanos tienen seis tipos de sangre y pertenecen a cuatro o siete razas (según la clasificación que se utilice). ¿No seria lógico que hablaran un numero ínfimo de lenguas, quizás media docena?

Los pájaros de la misma especie hablan el mismo lenguaje en todas las latitudes. Otro tanto ocurre con los perros, las abejas o los gatos. Solo los humanos hemos sido capaces de llegar a hablar más de 15.000 lenguas diferentes.* 

¿Por qué se produce esta situación? Una lengua se divide con la dispersión del grupo humano que la habla; el latín se convirtió en el francés, el italiano, el rumano, el castellano, el catalán, el portugués... pero a partir de un momento dado esta tendencia a la dispersión y a la multiplicación de lenguas se invirtió y muchas fueron progresivamente desapareciendo. De las 15.000 que se hablaban en el siglo XVI hasta las aproximadamente 6.000 que se hablan en nuestros días.

Como todo, este proceso tiene una parte buena y una mala: al reducirse el número de lenguas la comunicación entre los grupos humanos es teóricamente más fácil, pero con cada lengua que desaparece se pierde una cultura, la expresión de una sociedad y toda una mirada sobre el universo.



* Daniel Nettle y Suzanne Romaine, Vanishing Voices. The Extinction of the World's Languages, Oxford University Press, 2000

viernes, 14 de junio de 2013

Una lengua muerta muy viva

Liz I, de Bernardo Torrens

Que el tiempo pasa muy rápidamente es cosa sabida y que algunos acontecimientos resulta difícil situarlos en el tiempo también. A pesar de eso, he encontrado unos datos respecto del latín que me han sorprendido mucho. Por ejemplo, que en la enseñanza superior en Francia las tesis en francés solo se admitieron a partir de 1905, o que en Oxford y Cambridge los discursos de recepción de los doctorados honoris causa se siguen pronunciando en latín.

En el siglo XXI la Iglesia Católica es el único reducto del latín hablado, lengua oficial del Vaticano, donde los lingüistas se han visto obligados a inventar palabras que no existían para denominar nuevos conceptos como res inexplicata volans, para 'ovni'; birota automataria, para 'moto'; o iuvenis voluptuaries, para 'donjuan'.

Mientras, nosotros seguimos imperturbables diciendo que Fulano es el alma máter de la fecundación in vitro, que Urdangarin presentó el currículum vítae motu proprio, que Bárcenas ha sido declarado persona non grata en su portal, que es vox pópuli que bajarán las pensiones y será difícil mantener el statu quo o que Europa nos enviará otro ultimátum diciéndonos que es condición sine qua non que los bancos actualicen sus balances.

Y de tal forma está presente el latín en nuestros días que hasta los estadounidenses expresan algo tan común como la hora con una expresión latina: AM, ante merídiem, y PM, post merídiem.

Y es que el latín es una lengua muerta muy viva.

miércoles, 12 de junio de 2013

Muchas palabras le debe uno a su madre

Las manos de mi madre, de Eduardo Naranjo

"Muchas palabras le debe uno a su madre, llegadas en la lengua materna, pero ninguna acaso como esta "nidia". Hablaba de la nieve que había caído en León y lo peligroso que estaba el caminar por la calle, hasta llegar a lugar seco. Recordé en ese momento habérsela oído otras veces, en mi niñez, pero había olvidado su significado. Supuse que no pasaría de ser una palabra deformada, acaso inexistente o de circulación restringida al ámbito familiar o comarcal. Después de hablar con ella fui al diccionario como quien lleva en la mano un décimo de lotería. Y la alegría no fue menor que si le hubiera tocado a uno el gordo, pues ninguna otra podría haber sido más exacta, aun pudiendo significar dos cosas casi contrarias, ya que ahora no sé si la refería al tramo en que la nieve hacía peligroso el caminar o a la parte seca en la que el peligro desaparecía. En todo caso es para mí tan nueva como un manto de nieve recién extendido sobre la tierra."

Trapiello, Andrés: Miseria y compañía, Valencia, 2013

domingo, 9 de junio de 2013

¿Por qué callé aquel día?

Woman with Eyes Closed, de Lucian Freud

A veces apunto citas extrañas que encuentro por ahí y luego, cuando las recupero al cabo del tiempo, no me parecen tan interesantes y no sé por qué un día me llamaron la atención. Pero hay una que sigue intrigándome y despertando en mí interés y curiosidad. Me refiero a algo tan sencillo como "Escribía silencios".

Es una cita de Rimbaud que me dejó pensando qué querría decir el autor con esa frase misteriosa. Para mí que se refería a alguien que escribe parapetado tras un sutil muro protector, alguien que escribe palabras que hilan frases pero que no cuenta en realidad lo más importante, que nos hurta lo que de verdad le mueve.

Los silencios tienen significados muy distintos, hay silencios que son afirmaciones, "el que calla, otorga"; hay silencios que pesan como losas y silencios que castigan; está el silencio administrativo y aún aquel de Bécquer* que distancia definitivamente a dos enamorados por no haberlo roto a tiempo:

"Asomaba a sus ojos una lágrima
y a mi labio una frase de perdón;
habló el orgullo y se enjugó su llanto,
y la frase en mis labios expiró.

Yo voy por un camino; ella, por otro;
pero, al pensar en nuestro mutuo amor,
yo digo aún: -¿Por qué callé aquel día?
Y ella dirá: -¿Por qué no lloré yo?".

* Rima XXX
   

jueves, 6 de junio de 2013

La palabra más larga del mundo

Die couch, de Alexander Onishenko

Esta palabra que les transcribo aquí: 'Rindfleischetikettierungsüberwachungsaufgabenübertragungsgesertz' tiene 63 letras y ostentaba el récord de ser la palabra oficial más larga del idioma alemán, y digo "ostentaba" porque ha sido suprimida.

Es una palabra que a mi me parece impronunciable, más larga que el 'supercalifragilisticoespialidoso' de Mary Poppins, pero curiosamente más corta que su traducción al castellano, que sería: "Ley sobre la transferencia de las obligaciones de vigilancia del etiquetado de la carne de vacuno y la designación de los bovinos".

Y ya que vamos de récords, sepan ustedes que la palabra más larga del mundo es también alemana: 'Donaudampfschifffahrtselektrizitätenhauptbetriebswerkbauunterbeamtengesellschaft'. Para su curiosidad significa: "Sociedad de funcionarios subordinados de la construcción de la fábrica principal de la electricidad para la navegación de barcos de vapor en el Danubio"

Cosas de un idioma aglutinante, es decir, aquel en el que las palabras se forman uniendo morfemas independientes. ¿Harán los alemanes ejercicios respiratorios para no quedarse sin aliento? Teniendo en cuenta estas larguras comprende una la denominación de los 'mini-jobs'.

lunes, 3 de junio de 2013

¿Usted infringe o le infligen?

Sonja, de Christian Schad

Infligir e infringir son dos verbos que suelen causar confusión. Son relativamente inusuales y su pronunciación se parece demasiado para que el genio del lenguaje no nos juegue una mala pasada de vez en cuando.

La voz infligir es un cultismo adoptado por el castellano en el siglo XIX; procede del latín infligere, que tenía, entre otras acepciones, las de 'golpear, herir, causar un daño' y parece ser que llegó al castellano utilizando el camino del francés infliger donde significaba sobre todo 'imponer un castigo'; de ahí que en castellano signifique 'causar daño, imponer un castigo'.

La confusión escrita es con otro verbo culto, infringir, también adaptado en el siglo XIX desde el latín infringere 'romper, quebrantar' y bastante usual para aludir al incumplimiento de promesas, órdenes, leyes, etc.

Ambos términos se prestan a confusiones, tanto en la pronunciación como en lo escrito, al cruzarse en la mente del hablante dos verbos de sonido tan parecido. Así no es nada infrecuente que nos tropecemos con "normas *infligidas", "unas derrotas *infringidas" y "heridas *inflingidas".

Quizás un truco para no equivocarnos sea recordar que inflingir tiene la misma raíz que afligir y que produce aflicción, pues alude siempre a golpes, castigos, humillación o derrota; en cuanto a infringir se relaciona con infracción e infractor, pertenecen a su familia léxica voces como fractura y frágil y alude siempre al quebrantamiento de normas, leyes y órdenes.